Un hermano perdido está bailando en mi cabeza. Y todo su cuerpo, sus manos, su camisa húmeda de transpiración, me llevan al compás de esa música brillante e infinita que se cuela a través de todos nuestros sentidos, quizás fantaseando con complacernos demasiado. Él es mi sangre, es mi tesoro perdido en el país de la infancia. Es el ser que habita las praderas profundas del viento, es aquél que nace siendo sombra para convertirse en una galaxia profunda e infinita. Él existe en mi cabeza y por eso lo estoy creando, lo estoy amando sin amarlo, sin conocerlo, sin poder ponerle un rostro y apenas un nombre, "Nico". Él es la fuerza que yo no tengo, es el espacio de las sobras que fui dejando inertes en el paraíso terrenal. Me pertenece. Es un hombre y me pertenece en absoluto, me deja refugiarme en sus brazos, sus dos únicos brazos que se despliegan ante mí maravillados de tristeza y de amor y me abrazan y me besan solamente con sus ojos. Su existencia es consoladora, es reconfortante. El baila conmigo y podríamos estar haciéndolo así toda la noche, hasta desgastarnos, hasta que los zapatos se hundan en el piso y no haya piso, hasta que la música se detenga y siga en nuestras cabezas, para siempre. Nico es un refugio que no existe, Lo he inventado. Y es en el delirio de mi soledad, en donde lo busco, lo quiero para mí, lo necesito. Él es el tiempo, la arena mítica, el sol. Todo aquello que me conecta, me vuelve una niña, un caracol, un sueño....
Locura y postpandemia: algunos poemas de Oquendo de Amat que leímos con Marjo
Ciclo de poesía, primer encuentro. 24 de junio de 2022- San Telmo POEMA DEL MANICOMIO Tuve miedo y me regresé de la locura Tuve miedo de ser una rueda un color un paso PORQUE MIS OJOS ERAN NIÑOS Y mi corazón un botón más de mi camisa de fuerza Pero hoy que mis ojos visten pantalones largos veo a la calle que está mendiga de pasos. _____________________________________________________________________________ MADRE Tu nombre viene lento como las músicas humildes y de tus manos vuelan palomas blancas Mi recuerdo te viste siempre de blanco como un recreo de niños que los hombres miran desde aquí distante Un cielo muere en tus brazos y otro nace en tu ternura A tu lado el cariño se abre como una flor cuando pienso Entre ti y el horizonte mi palabra está primitiva como la lluvia o como los himnos porque ante ti callan las rosas y la canción ____________________________________________________________________________ POEMA DEL MAR Y DE ELLA Tu bondad pintó el canto de los pájaros y el mar ven...
Comentarios
Publicar un comentario